El apego
Para definir este concepto es necesario citar a John Bolwby, un psiquiatra que publicó la teoría sobre el apego en los años setenta.
El apego se establece entre un niño y/ o niña y otro individuo, pudiendo ser su madre, padre o cuidadora, que considera que están más capacitados para la vida.
Asimismo, el apego se construye en la familia y es el patrón de funcionamiento para otras relaciones sociales.
Apego Seguro
Lo conforman aproximadamente el 65% de los niños. Estos se muestran inquietos ante las separaciones y en el reencuentro buscará el contacto físico, en caso de que esté muy disgustado.
Socialmente, se relaciona con extraños cuando el cuidador está delante.
Apego Resistente o Inseguro
Es normal en el 10% de los niños, los cuales tratan de estar cerca del cuidador y cuando se va, se disgusta enormemente. Y cuando "su persona vuelve", se muestran enfadados y evitan el contacto.
Apego Evitativo
Es propio del 20% de los niños, ignoran a los cuidadores. Y, respecto a su vida social, a veces se muestran sociables aunque normalmente los evitan.
Apego Desorganizado
Forman parte de este "grupo" el 5-10% de los niños, que mezclan patrones de evitación y resistente. De acuerdo con esto, ante la vida se muestran con frialdad y desinterés.
El apego es importante para los niños debido a que afecta en su desarrollo directamente. Hay 3 razones que justifican esta teoría:
Necesidad Biológica
Como seres humanos, necesitan estar cerca de otras personas y además, crear un vínculo con ellos. Es imprescindible tener personas que les cuiden y quieran.
Espacio de crecimiento
Dependiendo de cómo sea el entorno de desarollo del niño y de la calidad de apego que haya mantenido con su círculo más cercano, así serán las bases de su futuro.
Herramientas para la vida
Un niño que se desarolla en un espacio donde se les incita y apoya a cumplir sus sueños, serán los mismos que obtendrán las herramientas necesarias en el futuro para aforntat su vida.
Es cierto que a lo largo de este blog hemos hablado del apego como una necesidad para crecer seguros y amados. No obstante, esto se puede volver un problema cuando se crea una dependencia ya que puede dañar nuestra autoestima.
Al darse una relación de dependencia emocional (con apego dependiente), se puede considerar como una adicción. Esto se puede observar al apartar el niño de su madre, por ejemplo, este va a buscar la "reconciliación" para sentir la segregación de hormonas y neurotransmisores.
Este cuento relata la historia de Luli, una niña que viven en una familia de canguros, que la cuidan y le satisfacen sus necesidades. Sin embargo, llega el momento en el que la niña tiene que emprender su camino sola. De esta forma, se puede descubrir la importancia de mantener un vínculo seguro y afectivo con nuestras familias. Asimismo, es de gran utilidad para trabajar la confianza en uno mismo.
Algunos autores consideran el apego desorganizado (desatención hacia el niño o niña), del que ya hemos hablado anteriormente como un trastorno.
Otro de los trastornos relacionados con el apego es el Trastorno Límite de la Personalidad (TLP), la depresión, los problemas de autoestima o los trastornos de la ansiedad pueden tener su origen en traumas relacionados con el apego.
Como medio para solventar este problema es conveniente acudir a un especialista, con la terapia aprenderemos a desarrollar apegos seguros con otras personas. Además, se adquirirán herramientas para regular nuestras emociones, así como reflexionar acerca de nosotros y los demás de forma empática.
El autocuidado, que conlleva a escuchar nuestras propias necesidades y respetarlas, es un aspecto al que no le damos gran importancia; en cambio es muy necesario que se tenga en cuenta para poder tener una relación óptima tanto con nosotros como con nuestro alrededor.
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